Había una persona a la que una vez quiso, pero ella se casó con su hermano y pronto dio a luz a su sobrina... Con el tiempo, su amor no correspondido lo distorsionó y lo cambió mientras reflexionaba sobre cómo le habían arrebatado al amor de su vida.

Un día, su sobrina le envió un mensaje pidiéndole que se quedara en su casa porque no se llevaba bien con su padre. Ya lo había hecho antes y él dijo que estaba bien, pero esta vez empezó a notar cuánto había crecido... en más de un sentido... y que ella también era la imagen dividida de su amor no correspondido...

Con el juicio nublado y la mente retorcida, sacó un afrodisíaco que había conseguido de un vendedor por casualidad y decidió aprovecharlo poniéndolo en la bebida de su sobrina... No tardó mucho en poder salirse con la suya con ella...